Risto Mejide se hace la víctima

El publicista reconvertido en presentador de televisión sensacionalista Risto Mejide hace días que se queja porque Andreu Buenafuente ha hecho bromas sobre él. En el Late motiv se mofó del gentío que había en su boda y luego, en Homo Zapping, hicieron un sketch en el que parodiaban una entrevista en la que se reían de la diferencia de edad entre marido y mujer. Son las consecuencias del exhibicionismo sentimental y la comercialización de la boda: te conviertes en presa mediática fácil. Mejide ha respondido a las bromas de Buenafuente haciéndose la víctima y con el amor propio herido, pero se excusa alegando que no es una cuestión personal sino que habla en nombre de un supuesto colectivo ofendido por la broma: el de las parejas con diferencia de edad.

La primera respuesta de Buenafuente a la ira de Mejide a través de un blog, más allá de innecesaria, fue decepcionante porque el humorista, en tono trascendente, parecía justificarse. Si los humoristas tienen que dar explicaciones por cada persona a la que le meten el dedo en el ojo, su trabajo pierde el sentido.

Ahora bien, el lunes por la noche, desde Late motiv, Buenafuente lo hizo mejor. Utilizó el humor y el ingenio para contestar, que es lo que le da autoridad. Y a continuación confesó, con cierto sarcasmo, que estaba perplejo porque ese mismo día le habían invitado al All you need is love (o no) para ir a su plató a conversar con Mejide. Fantástico cómo Buenafuente hizo evidente como el publicista quiere rentabilizar el conflicto a nivel de audiencia. Le es indispensable porque su programa de Telecinco está en horas críticas por los malos resultados.

All you need is love (o no) ha degenerado aún más por culpa de la búsqueda desesperada de espectadores. Pero a pesar del disfraz, es un programa de testimonios en el que Risto entrevista a personas que han sufrido desgracias. Es la tele caduca y amarilla de los años noventa que se recreaba en el dolor de gente anónima. Después de hablar con una mujer que sufrió un trágico accidente de coche, Mejide le pregunta a la madre de la chica: "¿Te has sentido culpable del accidente? Injustamente, eh. Pero al fin y al cabo eras tú la que conducías... " También entrevista a famosos para chafardear. El lunes era el turno de David Bustamante, que se acaba de separar. Antes de empezar, Mejide le dijo: "Me molesta profundamente cuando los medios de comunicación nos fijamos solo o en el principio o en el final de las relaciones y no respetamos que lo que pasa en medio es patrimonio única y exclusivamente de las personas que lo están viviendo. Así que, tío, mi apoyo para ti y para Paula". Y a continuación le preguntó: "Dicho esto, quiero saber cómo Bustamante afronta una ruptura". Muy coherente todo. Telebasura ridícula, hipócrita y cursi. Francamente, Mejide está de suerte. Lo que sorprende es que el gremio de humoristas del país no se ceben aún más con este personaje.